ANTES DE LA FUNDACIÓN
Desde antes de la llegada del conquistador español, la zona central del país estuvo poblada por numerosas tribus aborígenes, y no es de extrañar que los fértiles valles que hoy forman parte de la comuna de San Carlos, hubiesen acogido a más de uno de estos pueblos. Esto lo confirma el primer encuentro entre españoles e indígenas, conocido como el combate de "REINO HUELEN", llevado a cabo en las inmediaciones de la confluencia de los ríos Itata y Ñuble, en el año 1536.
"Hay que señalar también que para muchos autores este combate habría tenido lugar en las cercanías de lo que en la actualidad es la ciudad de San Carlos" .
Precisamente en esta zona, antes que llegase Almagro y su ejército expedicionario, estaban instalados los indios de Itihue, que llegaron a constituir una población bastante numerosa. Se presume que la rápida disminución de esta agrupación se debe a una emigración hacia sectores más protegidos, sin embargo, no todos se fueron, de hecho, décadas después de la fundación de la Villa aún quedaban algunos caciques en la zona.
El territorio formado por numerosos montes y abundante vegetación fue durante el tiempo de la conquista refugio perfecto para las tribus de naturales que hicieron fácil presa a los primeros aventureros que se instalaron en tales parajes.
A mediados de 1750 se empieza a poblar el sitio ocupado por los Itihuenses y otros lugares, como Verquicó, Monte Blanco, orillas del río Perquilauquén, Cachapoal, llegando inclusive a formar una Villa, la que debió ser abandonada por la gran sublevación "Pehuenches-Chiquillanes" en 1769.
Itihue, a fines del siglo XVIII, aún era un poblado indígena, siendo el Cacique JUAN REIMAN su máxima autoridad. En general, podemos decir que éste al igual que otros poblados no eran más que agrupaciones de indígenas que carecían de toda cohesión geográfica, social y política, pese a ello, no fue fácil para los españoles establecerse en estos lugares, sino, hasta el último cuarto del siglo XVIII.
FUNDACIÓN DE LA VILLA DE SAN CARLOS DE ITIHUE
Si bien el Decreto de fundación de la Villa de Carlos fue firmado el 3 de Julio de 1800, el primer antecedente data del año 1783 en los archivos parroquiales , en los cuales, ya se habla de la Villa de San Carlos de Itihue.
En la época de la fundación el territorio político-administrativo del país se dividía en dos Intendencias, la de Santiago, que se extendía desde Copiapó hasta el río Maule y la de Concepción, que se extendía desde el río Maule por el norte hasta la frontera, con límites no determinados por el Sur. Cada una de estas intendencias se subdividía en Partidos. La Intendencia de Concepción tenía 8 Partidos y uno de ellos era Chillán. A su vez, cada partido estaba divido en Doctrinas, cuyo asiento era el Curato o Parroquia. Por lo tanto la villa se emplaza en la Intendencia de Concepción, Partido de Chillán, Doctrina de Verquicó.
La necesidad de fundar una villa, radica fundamentalmente en el crecimiento poblacional y en la distancia que existe con lo otros núcleos urbanos de importancia existentes en el Partido.
Los vecinos de Verquicó, apoyados en la política de "fundaciones de Villas" , elevaron una solicitud al gobierno para que se creara la "Villa de San Carlos" .Lo curioso es que estos mismos vecinos no se ponían de acuerdo en el lugar en donde se fundaría, ya que decidían de acuerdo a sus intereses. Se propusieron diversos lugares como las orillas del río Perquilauquén, del Estero de Buli, en Paredones de Ñiquén, o en la Isla, sitio ubicado entre los esteros de Buli y Agua Buena. En definitiva, el problema común que enfrentaron las Villas para su fundación fue el asunto de los terrenos.
La Villa de San Carlos debió esperar la llegada de un nuevo siglo para verse formalmente constituida: el entonces Gobernador de Chile, el español nacido en Baena, Mariscal Joaquín del Pino de Rozas y Negrete, firma el Decreto de Fundación el 3 de julio de 1800. El nombre de San Carlos lo llevará la Villa en Homenaje al Rey Carlos V, quien entonces sustentaba la corona de España; con esta acción se atestigua la fidelidad del Reino hacia el Monarca español. Por esta razón y para fomentar el progreso de la Villa el Consejo Real decretó para San Carlos el título de nobleza y será concedido a aquellos pobladores distinguidos con bellas cualidades de sangre, cristiandad, buenas costumbres, armonía en el trato con los vecinos. etc...
El lugar más apropiado que se propuso para establecer la Villa fue el sector de LLahuimávida, cuyo centro se encontraría en lo que en la actualidad es la Alameda. La primera obra pública realizada tuvo que ver con la dotación de agua para la Villa.
Como a esta nueva Villa le tocó nacer a la vida en los tiempos en que casi terminaba la época colonial, y en que empezaba la época azarosa de las luchas por la Independencia nacional, que duraron unos quince años, San Carlos de Itihue debió llevar, en sus comienzos, una vida precaria y llena de zozobras.
El 24 de noviembre de 1801 se realiza el primer trazado de la villa, que se caracteriza por tener la forma del típico damero español, dando un total de 120 sitios o solares, distribuidos en poco más de 36 manzanas.
No jugó, por lo mismo, papel de importancia mayor, solo se contentó con ver pasar junto a ella el ir y venir de los ejércitos realistas y de los patriotas, durante el largo bregar de unos por conservar el dominio y de otros por lograr la Independencia nacional.
Es así como el 15 de Mayo de 1813 se libra aquí en San Carlos, un poco al sur de la ciudad, en el lugar denominado "Ablemos", el "Combate de San Carlos" , entre las fuerzas españolas comandadas por Antonio Parejas, que al encontrarse enfermo, delegó. el mando en el Capitán Juan Francisco Sánchez y las fuerzas patriotas que eran dirigidas por José Miguel Carrera.
En la campaña del año 1817, el General Ramón Freire, a la cabeza de una expedición de Santiago al Sur, aparece ocupando, sin mayor dificultad, según las crónicas de esos tiempos, las plazas de Parral, San Carlos y Chillán, plazas en las que impuso, por supuesto, autoridades patriotas. Con todo, San Carlos, no sigue apareciendo en las campañas de los años siguientes Seguramente esta pequeña plaza siguió la suerte y las alternativas de Chillán.
EVOLUCIÓN ADMINISTRATIVA:
Al redactarse la Constitución de 1833, quedó establecido que a partir de entonces San Carlos sería agregado a la provincia de Maule. Esta situación se mantuvo hasta que en 1848, en el gobierno de Manuel Bulnes, se crea la provincia de Ñuble con dos Departamentos: Chillán y San Carlos.
En 1849, el gobierno del presidente Manuel Bulnes por Ley dividía en Subdelegaciones a la provincia de Ñuble. Estas subdelegaciones fueron la base para crear las comunas. San Carlos tenía, por esta circunstancia, 12 Subdelegaciones.
En 1854, se crea la Municipalidad de San Carlos. Desde entonces comenzaron a realizarse sesiones periódicas para dar solución a problemas administrativos y de la comunidad. Aparte de cumplir funciones de carácter social y de interés comunitario, la Municipalidad tenía a su cargo la seguridad ciudadana. Hasta 1854, el único organismo encargado de velar por la seguridad de la población, era el cuerpo de Serenos. El alcalde reglamentó este servicio haciéndolo más ecuánime y efectivo.
El 9 de Junio de 1865 cuando la Villa de San Carlos contaba con una población de 5.456 habitantes, se le concede el título de ciudad.
El 22 de diciembre de 1891, la Ley de comuna autónoma se promulga. Desde esa fecha San Carlos es comuna.
CONFLICTOS BELICOS
En el aspecto bélico San Carlos tuvo una importante participación en las Revoluciones de 1851 y 1859, especialmente en esta última, donde se destacó el General JOSÉ VICENTE VENEGAS, quien posteriormente fuera Gobernador de San Carlos en los años 1867 como interino y como titular entre los años 1868 y 1870. Hoy una calle de nuestra ciudad recuerda su nombre.
San Carlos tuvo también una importante participación en la Guerra del Pacífico, de hecho, el Gobernador de esa época, don BALDOMERO SILVA SEPÚLVEDA fue quien debió organizar y seleccionar a los hombres que irían al frente de batalla en el norte. En la actualidad una población lleva su nombre..
En nuestra ciudad fueron enrolados más de 200 hombres, pero como era de esperarse solo algunos regresaron. Los restos de estos valientes sancarlinos descansan hoy en un Mausoleo que la comunidad les erigiera en el Cementerio local, en memoria y en agradecimiento a la valentía y coraje que tuvieron para defender a su patria.
Por otra parte, quien merece nuestro mayor reconocimiento, es sin duda, el General nacido en esta tierra de Itihue, SOFANOR PARRA HERMOSILLA, quien estuviera al frente en las batallas de Huamachuco, Chorrillos y Miraflores, entre otras convirtiéndose por su valor e inteligencia en una de las máximas figuras del ejército chileno. Una calle, una población y una Escuela llevan hoy el nombre de este insigne soldado..
Pero, esta no fue la única forma de participación de la ciudad de San Carlos en la Guerra del Pacífico; fue de gran importancia, el aporte de la zona en el abastecimiento de harina de trigo para los ejércitos llegando incluso a escasear este alimento en la ciudad ya que la prioridad eran los Combatientes del Norte. Uno de, esos molinos abastecedores de este vital alimento todavía permanece en pie, es un verdadero Monumento Nacional, ya que fue construido en la década 1860, su primer dueño fue el canadiense radicado en nuestra ciudad ENRIQUE PRICE, más tarde pasó a manos de CARLOS ALVAREZ CONDARCO. Actualmente pertenece a la Sociedad de la familia VIVERO, está ubicado en las esquinas de las calles Diego Portales y Roble. Su estructura es prácticamente igual a la original, ha tenido a través del tiempo muy pocos cambios, es un edificio de tres pisos.
LOS PINCHEIRAS: UN EJERCITO DE BANDOLEROS:
Fue en las campañas contra las montoneras pro realistas de los Pincheira, en donde San Carlos jugó un papel más importante y tuvo actuación. En efecto, en el mes de Octubre de 1820, las fuerzas nacionales, disminuidas por la deserción, y mandadas por los comandantes Viel y Arriagada, se retiraron a Parral. Aprovecharon esta ocasión las montoneras, que tenían su refugio en San Fabián de Alico, y se dejaron caer sobre San Carlos. La población desguarnecida fue fácilmente ocupada y saqueada. En seguida, dieron muerte a varias personas y prendieron fuego a la ciudad. Mientras el comandante Pedro Ramón Arriagada recuperaba San Carlos al mando de 150 soldados, las montoneras habían huido anticipada e impunemente de la ciudad.
Este era el segundo ataque que sufría San Carlos en el año 1820. En Enero había soportado un asalto de mayor intensidad. En noviembre del mismo año, San Carlos sufrió un tercer asalto de parte de las montoneras de los Pincheira.
El 27 de noviembre, las fuerzas nacionales, al mando del comandante Arriagada, atacaron sorpresivamente a las montoneras y le dieron tremenda batida, que prácticamente las exterminaron.
San Carlos volvió, pasada la época de las montoneras, a su existencia tranquila y sin ruido. Unicamente el terremoto del 20 de febrero de 1835, que hizo destrozos desde el río Maule hasta más allá del Bío-Bío, sacó a la Villa de su existir apacible. No fueron pocos los daños que ese tremendo sismo causó en la población. Muchas casas se desplomaron y perecieron algunas personas también. Empero, San Carlos se rehizo y empezó a vivir de nuevo, confiadamente, en demanda de un mejor porvenir.
PROGRESO GENERAL DE LA CIUDAD EN LA SEGUNDA MITAD DEL SIGLO XIX
HOSPITAL
En 1870 don NICOLAS DEL PINO, pariente del Fundador, donó una de sus propiedades para edificar en ella un Hospital. Desde sus inicios el Hospital de San Carlos ha servido en forma permanente y con dedicación a la comunidad. El actual edificio fue construido después del terremoto de 1939, su estructura se ha ido modificando y modernizando con él correr de los años, todo ello, con el único deseo de mejorar la salud de nuestro pueblo. Recientemente fue inaugurado un moderno Servicio de Urgencia, que nos permite vivir más tranquilos.
EDUCACION:
Durante los primeros años de la Villa de San Carlos, no existió una institución formalizada que se encargara de la educación de los niños, salvo algunas iniciativas de maestros particulares.
La señora Josefina Sttockle fue quien abrió el primer colegio para señoritas.
En 1888, durante el gobierno del Presidente José Manuel Balmaceda, se creó la primera escuela pública fiscal de hombres de San Carlos. Escuela que aun presta servicios a la enseñanza y que hoy lleva el nombre de Escuela D-99, Diego Portales Palazuelos.
Más tarde se creó la escuela superior femenina que posteriormente se denominó escuela Nº 2 y que hoy en un moderno edificio lleva el nombre de Escuela E-140 General Sofanor Parra Hermosilla.
PRIMER PERIODICO
Don JOSE MARIA INSUNZA da inicio al periodismo local y funda el 11 de Diciembre de 1864, el primer periódico en nuestra ciudad, "EL PEQUEN" , se publica hasta el 5 de Diciembre de 1871. En la actualidad tenemos solamente un diario en San Carlos, es lamentable, ya que en el pasado tuvimos más de veinte periódicos, en donde se vaciaban no solamente las noticias sino que además en ellos se publicaba mucha literatura. Da gusto ver y leer ejemplares de principios de este siglo, por lo que se lee en esa prensa, nos damos cuenta que antes, pareciera ser, había más cultura y más personas con inquietudes literarias.
FERROCARRIL
En noviembre de 1874, llegó el primer tren a San Carlos y la primera estación se ubicó al final de la Alameda. La actual fue inaugurada el 15 de Julio de 1949, frente al barrio cívico y la Plaza Lucio Concha Molina.
EVOLUCIÓN DE SAN CARLOS EN EL SIGLO XX:
El aspecto de la ciudad a comienzos de siglo no escapaba al común provinciano de la época; sus altas casas de adobes ensombrecían las estrechas calles. La vida transcurría sin mayores sobresaltos y seguramente esta tranquilidad solo se veía interrumpida por el chirrido provocado por el "CARRITO URBANO", al pasar sobre su tendido de rieles. Este original medio de transporte era tirado por caballos, atravesaba toda la ciudad llevando y trayendo pasajeros de la estación de ferrocarriles.
Cuenta la tradición que la oficina de Correos y Telégrafos del Estado y los edificios públicos se encontraban donde lo que es hoy el Cuerpo de Bomberos, la Cárcel Pública en la esquina de Maipú con Vicuña Mackenna; existía además un sitio eriazo donde funciona hoy el correo y las demás reparticiones públicas, lugar en donde se desarrollaban actos cívicos y competencias ecuestres. Otros edificios circundantes a la plaza eran viejas casonas con corredores, murallas de adobes y techos de tejas, lugares estos donde transcurría la vida social, con la fisonomía propia de esos tiempos, con calma y sin ajetreos.
Sin embargo, con el paso de los años esta ciudad aún semicolonial, fue cambiando su rostro, contribuyeron a ello, la llegada de extranjeros, principalmente árabes y españoles, quienes con el tiempo fueron dejando su huella, esencialmente en la actividad comercial, la misma que no se habría desarrollado. de no ser por un aumento sostenido de la población.
San Carlos antes del terremoto de 1939 tenía un comercio muy floreciente. El auge y el progreso que presentaba San Carlos en los primeros años del siglo XX permitieron el arribo de nuevos extranjeros, contribuyendo al adelanto y desarrollo del comercio local.
El primer banco financiero que se hizo presente en San Carlos fue el Banco de Talca, el cual comenzó a funcionar en Marzo de 1906. Hoy Banco de Santiago. Más tarde aparece la Caja Nacional- de Ahorros, cuya actividad fue continuada por el Banco del Estado de Chile, entidad que nació en 1953.
MOVILIZACIÓN COLECTIVA
Como las comunicaciones entre los habitantes del mundo rural y urbano eran muy necesarias para el intercambio y fortalecimiento de sus actividades (especialmente las referentes a la agricultura), es que a fines del siglo pasado aparecen las primeras empresas de transporte, con servicio de movilización interprovincial de coches tirados por caballos. En este siglo, a mediados de la década del treinta aparecen las primeras "Góndolas" (actuales buses) , con tres salidas diarias a Chillán. También había servicio a San Gregorio, Cachapoal y otros lugares cercanos a San Carlos.